"Me late, me late, me late corazón..."

Lo dicho, ayer fuimos a nuestra visita de rutina con el doctor Serratos. Lo tendrían que conocer. Es un chavo menor que nosotros, de barba de candado y al que siempre verán de bata blanca, camisa de rayas y corbata con nudo grueso. Es atento y parece muy tímido. Según nos dijo hace no mucho tiempo, está a punto de casarse. Quizá por eso llevaba bien la cuenta de los partos que había atendido en el año hasta entonces: 64. Si le quieren hacer cuentas, no me pregunte cuánto cobra por este servicio; sólo créanme, sus tarifas son envidiables.
Pues con la novedad de que todo está muy bien. LOM subió 1.7 kilos el último mes, lo que le valió una estrellita en la frente por parte del médico, pues estuvo abajo de los dos kilos permitidos. Julieta, en cambio, aumentó de peso casi 80% desde hace casi un mes. La computadora marcó 1.8 kilos.
No sabemos qué sucedió, sin embargo, durante la revisión de ayer Julieta no quiso mostrar su mejor ángulo. Todo el tiempo tuvo pegada la nariz a la placenta lo que trajo como consecuencia una imagen similar a la de una nariz pegada al vidrio de un aparador. Suena dulce pero, en serio, no se veía nada agradable en el ultrasonido. Era como si su nariz solo tuviera un agujero y el ojo derecho lo tuviera a un nivel diferente que el debido. (¿Otra de sus travesuras?)
Así es que nos tomamos la libertad de editar el video, pensando que Julieta nos lo agradecerá cuando la vanidad la alcance. En esta ocasión, LOP les presentamos un latido que no sólo mueve el corazón de origen, sino el de LOM y EOP simultáneamente. Sólo basta con ver y oír esto para que pongamos nuestras vidas a 134 latidos por minuto, el mismo ritmo cardiaco que tenía ayer nuestra poco fotogénica hija. Miren y escuchen esto, y deléitense como nosotros lo hicimos con esos rítmicos tambores africanos.





Con una maravilla como éstas, ¿quien se atreve a sentir miedo del futuro?

Palitos y bolitas

Ayer nos tocó ir al curso psicoprofi(ga)láctico y me dio la impresión de estar en un kinder-garden para adultos. Todos estamos emocionados por estar ahí. Todo es nuevo para los asistentes. Ya les he contado que LOM y yo disfrutamos mucho de estas sesiones.
Cada pareja acude en la segunda mitad de su embarazo. Ahí coinciden parejas de apenas 20 semanas, que si no lo dicen nadie se percataría que están esperando un hijo, y los "veteranos" de 30, 32 o 34 semanas, donde ya nos encontramos LOP.
Quizá este último grupo contrasta un poco con los "novatos" en cuanto a la cantidad de la información, pero sospecho que sigue habiendo al menos dos cosas en común entre todos los asistentes: el temor al momento del parto y... todo lo que sigue a partir de ahí.
No sé si esta sensación provenga de mi hormona paranoica, que se suele activar cuando más calma veo a mi alrededor. LOM y su servilleta hemos estado muy tranquilos y serenos, empollando juntos cada que vez que podemos hacerlo y por separados cuando cumplimos horarios de oficina. La última vez que peleamos fue hace como medio kilo o su equivalente, dos semanas. Todo un récord amigos.
Ayer en la noche, esa hormona se me activó y (otra vez) empezó a segregar una sustancia que se llama miedo. Y convirtió esa tranquilidad con la que me he sentido en las últimas semanas en un preámbulo de tormenta. Hagan de cuenta que camino en una playa rumbo a un mar que retrocede. Todo está en silencio. No hay pajaritos, ni marea. Sigo caminando hacia él, y él retrocede aún más. Lo que ahora siento es que en cualquier momento aparecerá ante mis ojos una enorme ola formada con el agua que antes retrocedió. (Creo que así describieron algunos el tsunami asiático de hace unos años).
Mi imaginación no llega a ver si la ola me revuelca y me hunde o si salgo a flote. Antes, pienso deliberadamente en algo que me vuelve a tranquilizar. Es un cuarto a media luz que en el fondo tiene una cajita. Me acerco y veo que esta caja tiene unos delicados barrotes de madera. Me inclino para ver dentro de esa caja y veo un montón de mantas, medio revueltas. Hurgo entre ellas cuidadosamente y veo un calcetín. Lo tomo en mi mano y descrubro que es más pequeño que mi palma. Sigo con mi vista el bultito de sábanas rosas y frazadas infantiles y de repente me encuentro con una carita muy redonda y de ojos muy grandes. Sus ojos me recuerdan a los de alguien muy cercano. Con esos ojos me mira como si también estuviera hurgando en mi cara. Yo, mientras veo su naricita y luego su boquita, muy chiquita. No puedo menos que sonreir. Y entonces, esa boquita también me sonríe.

PD1. Hoy vamos al doc a nuestra visita de rutina. Veremos cuánto ha crecido Julieta, le tomaremos fotos y video. Habrá que ver cómo se porta hoy. ¿Habrá aprendido a hacer otra seña?

PD2. Mañana es la noche de abuelos. La Jose quiere experimentar cómo se llevan la maternidad y Lacan. Yo, por mi parte, llevo a una abuela experta en esos y otros menesteres.

PD3. Sobre el dibujo en la panza de LOM, alguien me propuso darle un toque muy argentino a esta práctica: un autorretrato. Mejor sigo pensando...

¿Me porté como de 20?

Ya me llegó la primera propuesta para la obra de arte que pintaré sobre la otra obra de arte que, modestia aparte, hicimos la Jose y EOP. Olga propone que pinte algo parecido a los sonrientes globos amarillos que aparecen en esta foto.
Yo creo que se parece a la mascota de Wal-Mart. A LOM le gustaron las manitas, las antenitas y, en general, el asunto de incorporar algo más que sólo pintura.
Mientras veíamos la foto y relacionaba la imagen con el ruin imperialismo del consumo (¡ejem! y de los precios bajos... siempre), pensé que quizá sería mejor sacudirse el espíritu artístico y sin pudor vender la exlcusiva de la obra, por ejemplo, a Pfizer. ¿Se imaginan la panza de LOM con el dibujo de una pastilla azul con forma de rombo y una frase que diga "Sí se pudo, Sí se pudo...". Uno nunca sabe, quizá mañana hasta me compren los derechos sobre los acrónimos EOP y LOM y tengan un nuevo significado: El Orgulloso Patrocinador y La Orgullosa Marca...

Más vale tarde...

No sé por qué razón, ayer que escribí sobre mi carnal Eduardo elegí poner una foto de un trolebús. Quizá fue la nostalgia de cuando viajábamos de mosca para ahorrarnos la cuota y con eso comprarnos unos tacos al pastor en el Spartako de la calle Pino Suárez. O tal vez fue que no sabía que en la máquina de fotos tenía ésta, en donde sale con Natalia, la prima más cercana a Julieta en edad (nació hace dos meses y medio). Sirva este post para hacerles justicia con las imágenes y mostrarles a H-10 con S-25 (¿o 26? no sé ni qué número de sobrina es, pero prometo averiguarlo en el archivo histórico de Doña Margarita, del cual ya les contaré más adelante). Como se darán cuenta por lo "entretenida" que estaba Natalia y por las rayas tricolores en la cara de H-10, la imagen fue tomada durante las fiestas patrias.

Y hablando de fiestas patrias, les cuento que Julieta asistió el domingo pasado a su primer desfile del 16 de septiembre. Sospecho que lo "disfrutó" tanto como Natalia una noche antes. En todo caso, LOM no perdió la oportunidad de asolearse mientras veía el montón de soldaditos marchar en Av. Juárez en jeeps, motos y hasta tanques. Por suerte, esta vez no se cayó ningún avión.

Por cierto, hoy Juli cumple siete meses de edad intrauterina, así es que (todos juntos): "Essstassson / lasmañani / tas / quecanta / baelReyDavid / alasmu / chachasboni / tasselascanta... mos / a / quí" (aquí van los aplausos)

PD: Gracias a todos los cursis que ayer votaron a favor de que se vale ser cursi cuando se está esperando a un hijo. No saben qué tranquilidad siento ahora. Los quiero a todos, nunca cambien, valen mil... (jejejeje, esto último fue ironía, eh! Oigan, no era en serio.... se los juro... no, yo no soy así... no me hagan esto... )

Aprendiendo a volar (aunque sea como moscas)

Otro comentario que vale mucho la pena registrar. Es de mi carnal Eduardo, el que me enseñó a viajar de mosca atrás de los troles. Ya les contaré más de él.



Hola Carnal
Me parece muy bien todo lo que nos has platicado de esta nueva etapa en tu vida y realmente me da mucho gusto por ti y por Josefina. Lo único que te puedo decir es que tienes mucha razón al comentar lo del instinto del ser humano, él te va marcando muchas cosas y todo lo que parece muy difícil es más fácil de lo que te imaginas.
Te puedo decir que lo que estás viviendo y lo que viene en camino te va a llenar como ser humano y te vas a dar cuenta de lo que realmente vale la pena en la vida. No se de donde le salen a uno tantas cosas que jamás te imaginas que traes contigo. Es increible cómo un pequeño ser te cambia todo el panorama en tu vida.
Realmente te felicito de corazón, sigue disfrutando estos momentos. Te quiero mucho y síguele poniendo muchas ganas.
Atte.
Eduardo Ortega.
Tu H10 (hermano número 10)

He aquí mi respuesta.

Atención, atención... llamando a H10, repito, llamando a H10... jajajaja, el H10 me hizo recordar al Halcón 7 de Birdman (ejem, aunque también vino a mi mente el H24 de Bayer...).
Carnalito, qué gusto que participes en estos debrayes mater/paternales.
Para los que no lo saben, H10 acaba de ser padre de Natalia, apenas el pasado 5 de julio. Y, contrario a lo que yo llegué a pensar, él no es un prófugo del Kleen-Bebé...

El abuelo argentino

Hoy cumplimos 31 semanas de estar embarazados y el miércoles, siete meses. Y para celebrarlo, publicamos el conmovedor comentario que recibimos el sábado, y su respectiva respuesta. Hermoso por donde se lo vea:

Mi Querida Julieta:
Hace días que deseo escribirte pero pertenezco a la generación a la que la computación e internet le pasó por encima y lo hizo de goma. Afortunadamente, esta misma indómita tecnología me sirvió para recibir las recomendaciones de EOP y así poder acceder a esta pantalla y dejar las huellas de abuelo con muchos adjetivos: lejano, argentino, anhelante, ansioso, orgulloso, feliz, esperanzado, etc.
Lejano y Argentino: Obvio.
Anhelante: Es un deseo enorme de estar pronto en México.
Ansioso: Porque cuento los días que faltan para verte. Pronto contaré las horas.
Orgulloso: Porque LOM, "Mi Niña", mi "única hija", "mi tesoro mas preciado", me hará abuelo de mi "Primera Nieta", y primera hay una sola. No más.
Feliz: Estoy Chocho. Como no estarlo por todo lo dicho "ut supra".
Esperanzado: Tengo la esperanza y la convicción que la vida sera hermosa para tí. Este, nuestro primer contacto, deberá ser el inicio de una comunicación que espero saber cultivar. No quiero ponerme cursi. Estoy muy feliz de saber que creces según las previsiones.
Te aguardamos como Abuelo muy adjetivado.
EOAA (El orgulloso abuelo argentino)


Y la respuesta de la Jose:

Le escribo a EOAA, aunque para mí es mejor conocido como mi papá. Es muy lindo lo que acabo de leer, y me hace convertirme en LOH de EOAA. No temas en ponerte cursi, eso es una de las tantas cosas buenas que traen los bebés, el contacto directo con la ternura, y no creo que sea bueno reprimirlo, es más, aprovechemos ahora que tenemos una dulce excusa para ser cursis. Te quiero mucho.
Josefina

El lienzo redondo

Encontré este video en youtube. La única diferencia con lo que haremos dentro de dos semanas es que nos dividiremos el trabajo: yo seré el artista y la Jose, el lienzo. Seguimos esperando sus recomendaciones.

Pancita pintada

Amigos, LOM y su servilleta estamos a punto de tener la clase de belly painting donde EOP pintará la pancita de la hermosa madre de Juliet. Tengo muchas propuestas para ello, pero me gustaría que me ayudaran. He buscado en internet opciones y más opciones, pero son tantas y tan bonitas que me está siendo difícil elegir.
Ya sé que algunos de ustedes me van a decir que pinte la que me salga del alma, y tengan por seguro que así será, pero no está de más tener una ayudadita por si convenzo a la Jose de repetir la experiencia, digamos, cuantas veces sea necesario (y posible, claro). Por lo pronto, les dejo algunas imágenes de las que más me gustaron y más adelante les pongo un video que muestra un poco lo que es esta actividad.

Chichen-itzá. Ahora que está de moda...







Realismo. Demasiado obvio, ¿no creen?

Globalización. Global, por donde quiera que se mire.








Buscando a Nemo. Algo divertido sería una buena opción.